martes, 12 de marzo de 2013



Dos mujeres convalecen en coma en una clínica, la bailarina Alicia (Leonord Watling), de la que ternimará enamorándose un enfermero llamado Benigno (Javier Cámara) y la torera Lydia (Rosario Flores), cuyo novio (Darío Grandinetti) iniciará una estrecha relación de amistad con Benigno.



Volvemos a lo de siempre en estos títulos, el basamento principal para el triunfo de un melodrama es que éste logre implicar al espectador con los sentimientos manejados por sus principales ingredientes, una historia competente, que prescinda de elementos y detalles superfluos al margen de la intensificación dramática y un dibujo idóneo de los personajes principales, que aporte conocimiento de los mismos para estrechar vínculos afectivos entre el público y dichos personajes.
En "Hable con ella", una película que aborda temáticas como la soledad e incomunicación humana, la necesidad de la interactuación vital para el pleno desarrollo personal y social, el poder terapeutico de ese intercambio o el apego amistoso, no logra con plenitud los primeros objetivos citados ya que su historia de óptica masculina resulta endeble en su maniobra melodramática de autoría complaciente, irregularidad rítmica, simbología oficiosa y estética de calidad.
Las interpretaciones y las situaciones desarrolladas no transfieren con hondura la emoción buscada, punto esencial del éxito de una película de este género.
Sí es destacable en cambio la audacia narrativa con la inclusión de un falso y curioso corto de cine mudo (titulado "El amante menguante") y su siempre bien ponderada habilidad en la plasmación visual, pero el conjunto flaquea por la frialdad global de la obra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario